Los portafusibles son dispositivos que se utilizan para contener, proteger y montar fusibles. Los portafusibles se presentan en dos tipos básicos: abiertos o completamente cerrados. Los portafusibles de tipo abierto son los de pinza, bloque de fusibles, casquillo y tapa enchufable. Los de tipo completamente cerrado pueden utilizar un portafusibles que se inserta en un portafusibles o tener otros medios para encerrar completamente el fusible.
Un fusible es un dispositivo de protección de circuito reemplazable que brinda protección tanto al equipo como al operador del mismo en caso de una sobrecarga del circuito. El fusible tradicional consta principalmente de dos partes de un cuerpo de tubo, de las cuales ambos extremos tienen terminales de conexión de metal y el metal se funde en el cuerpo del tubo. La mayoría de los fusibles tienen forma de cilindro, es decir, construcción de cartucho.